Es común que, en todas las comunidades de vecinos, surjan conflictos entre los residentes del inmueble. Esto ocurre porque suele haber diferencias en las opiniones de cada propietario a la hora de resolver problemas comunes, tales como reparar desperfectos, instalaciones o el destino y uso de las zonas comunes. Sin embargo, los administradores de fincas pueden intervenir para solventar estos conflictos de la mejor manera posible.
¿Cómo pueden ayudarnos los administradores de fincas?
Los administradores son profesionales cualificados que cuentan con el conocimiento pleno de las leyes y normativas. Por ello, están capacitados para solucionar estas diferencias vecinales amparados en las leyes. Este conocimiento es, además, empírico, es decir: conocen las leyes, pero también saben cómo deben aplicarse en cada caso concreto.
Esta figura legal es fundamental a la hora de mediar en los problemas de la comunidad. Garantiza que las opiniones de cada uno de los vecinos serán respetadas, así como sus derechos. Recordemos que el administrador es una figura neutral que está al tanto de las novedades legales que afectan a los vecinos.
Contar con un administrador de fincas ofrece a los vecinos múltiples ventajas:
✔️ Evita que el conflicto se convierta en un problema grave.
✔️ Fomenta el diálogo y la buena convivencia vecinal fundamentado en el conocimiento de las leyes y las opciones reales con que cuentan los vecinos.
✔️ Su único objetivo es beneficiar a la comunidad porque se trata de una figura imparcial.
✔️ Educa a los vecinos para gestionar de mejor modo sus conflictos internos.
✔️ Satisface los intereses de todos los vecinos logrando soluciones imparciales y beneficiosas.
Qué tener en cuenta a la hora de contratar un administrador de fincas
Debemos asegurarnos de que los administradores de fincas deben estar colegiados. Esto asegura que cuentan con el conocimiento necesario. Desde Administradores Pérez Cobo ofrecemos asesoramiento y trato personalizado para gestionar de manera eficaz los conflictos.